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El Gobierno prepara la entrada en el capital de la banca

El Gobierno tiene casi listo el instrumento que le permitirá entrar en el capital de las entidades financieras. El marco está definido desde el 13 de octubre, pero al igual que sucedió con los 200.000 millones de euros en avales para bancos y cajas o con el fondo de adquisición de activos, hacía falta un reglamento de desarrollo. El Ejecutivo ya ha definido el contenido del mismo y tiene clara la letra pequeña para inyectar capital a entidades en apuros.

Es probable que el contenido de este mecanismo de rescate de bancos o cajas sea abordado en la reunión que esta semana mantendrá el presidente del Gobierno con los representantes de las principales entidades financieras del país y los presidentes de las patronales de bancos y cajas de ahorros.

La fórmula elegida es la adquisición de participaciones preferentes, según indicaron a este diario fuentes financieras. Se descarta la vía de las acciones o las cuotas participativas, que también estaba abierta en el decreto del 13 de octubre.

La vía de las participaciones preferentes es un instrumento que conlleva una remuneración que percibiría el Estado y que permite a las entidades reforzar su Tier 1 (indicador de solvencia que incluye acciones, las citadas participaciones preferentes y deuda subordinada). El BBVA ya usó ese mecanismo el pasado mes de diciembre, pero recurriendo a sus clientes, del mismo modo que el Santander había hecho con su ampliación de capital, en la que no contó con ayuda pública.

Un portavoz del Ministerio de Economía matizó que el Gobierno no aprobará este reglamento hasta que no sea necesario hacer uso del mismo y rescatar a alguna entidad.

Eso, por ahora, el Ejecutivo no lo ve cómo algo inminente, aunque en fuentes financieras se incide en las dificultades que atraviesa ya alguna entidad, que estaría agotando la provisión genérica, esa hucha creada a principios de la década para afrontar la parte mala del ciclo económico.

La economía española, en el mejor de los casos, acaba de empezar a transitar el desierto de la crisis y hay quien se está quedando sin agua. Por eso, el Ejecutivo quiere tener todo listo para cuando haga falta llevar agua a esta particular travesía. Hay un aspecto clave que juega en favor de las cajas de ahorros.

Estas entidades utilizaron a lo largo de los años 90 las participaciones preferentes como mecanismo para incrementar su solvencia. Sin embargo, el Banco de España, en su día, limitó el peso de esas participaciones al 40% del total de recursos propios.

El decreto permite saltarse ese precepto legal, lo que facilitaría el rescate de alguna de estas entidades sin necesidad de recurrir a la emisión de cuotas participativas, siempre más tediosa.

http://www.elmundo.es/mundodinero/2009/01/27/economia/1233042313.html